En este episodio de Booster Inmobiliario conversamos con Guillermo Arce, director y cofundador de BOWAS, una desarrolladora joven que está redefiniendo el concepto de edificios boutique en Buenos Aires, combinando diseño, identidad barrial y una mirada estratégica sobre la inversión inmobiliaria.
BOWAS nació en 2019 de la mano de los hermanos Guillermo y Rafael Arce, quienes llegaron al sector desde disciplinas ajenas al real estate —Guillermo, abogado, y Rafael, ingeniero— con la intención de explorar y aportar una visión nueva. Desde sus inicios, apostaron a crecer de manera orgánica, pasando de pequeños proyectos de 700 m² a desarrollos de entre 3.000 y 4.000 m², siempre con un enfoque en Palermo Soho, el barrio donde crecieron y que hoy consideran un refugio de valor para la inversión inmobiliaria.
Durante la charla, Guillermo explica qué significa realmente construir un edificio boutique. Más que una tipología, es una filosofía que busca mantener el espíritu de barrio: edificios de baja altura, con pocas unidades por piso, diseño moderno pero sin excesos, y una conexión con el entorno gastronómico, cultural y comercial que define a Palermo Soho. En palabras de Arce, “la clave es desarrollar sin romper la esencia del lugar”.
Su producto estrella son los departamentos de dos y tres ambientes, pensados para parejas jóvenes y profesionales que buscan calidad, confort y buena ubicación. Los proyectos de BOWAS se distinguen por su velocidad de ejecución, con plazos de obra de unos 30 meses y un ciclo total de desarrollo de alrededor de cuatro años, desde la compra del terreno hasta la posventa.
En el aspecto financiero, la empresa aplica una estrategia segmentada para sus inversores, permitiendo distintas formas de participación según el perfil y el riesgo. Existen tres categorías principales: el inversor tierra, que aporta capital al inicio del proyecto y obtiene la mayor rentabilidad; el inversor a pozo, que paga en cuotas durante la obra y sigue el avance de cerca; y el inversor de unidades terminadas, que compra propiedades finalizadas con financiamiento corto y las delega a la desarrolladora para su explotación. Este modelo flexible ha permitido que BOWAS crezca sostenidamente sin depender del crédito bancario, algo prácticamente inexistente en Argentina.
En cuanto a la comercialización, Guillermo destaca un modelo mixto: la venta directa en las primeras etapas, donde la confianza en el desarrollador es clave, y la colaboración con inmobiliarias una vez que la obra está avanzada y los compradores pueden “caminar el proyecto”. En paralelo, la empresa empieza a incorporar herramientas tecnológicas —como sistemas digitales para el seguimiento de costos, generación de planos y visualizaciones— aunque Arce insiste en que la construcción sigue siendo una “economía real y humana” donde el valor del oficio no puede reemplazarse.
Sobre el futuro, el director de BOWAS mantiene una visión optimista. Considera que el momento actual es ideal para comprar, ya que el metro cuadrado está por debajo del costo de reposición y, en un contexto de crecimiento económico, su valor tenderá a subir inevitablemente. “El desarrollo y la construcción son negocios que prosperan donde hay crecimiento, porque la gente siempre necesita más y mejores viviendas”, afirma.
Una conversación que combina visión emprendedora, conocimiento del mercado y respeto por la identidad urbana, mostrando cómo BOWAS está construyendo una marca reconocida en Buenos Aires a través de proyectos boutique que equilibran diseño, rentabilidad y pertenencia.
Escuchá el episodio completo en Spotify y YouTube y descubrí cómo BOWAS está redefiniendo la forma de desarrollar en Palermo Soho, con edificios pensados para vivir bien y perdurar en el tiempo.
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